Qué decir del elemento del que hablamos... genuíno representante de la clase política española, es decir, ruín, rastrero, cínico y sin ningún tipo de escrúpulos ni moral.
Es triste pero es así... salvo alguna que otra excepción, ese es el tipo de políticos que tenemos en este país.
Es un personaje dedicado a la confrontación con el adversario con el único fin de justificar sus acciones y las de los suyos, siempre con un cinismo y una arrogancia que esceden los límites de lo que debería estar permitido a este tipo de personas que todos pagamos con nuestros sueldos. Y lo más triste... siempre con sus cuatro palmeros presentes en sus mítines haciéndole sentir que lo que dice tienen algún sentido.
Decir que el tal Pepiño sólo es un ejemplo más de personaje político que por alguna razón me cae mal, pero que la lista de equiparables es muy amplia...
Personalmente le otorgo un "nivel de infamia" de 7 puntos sobre 10 posibles. En el fondo es un probrecito...
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